lunes, 17 de noviembre de 2008

¿Reciclar? ¡Pero que dices! (II)

Volvamos a las tres R:
-Reutilizar: volver a utilizar una cosa para lo que ha sido diseñada. Una botella, por ejemplo (el casco)
-Recuperar: utilizar una cosa (o parte de ella) para un objetivo distinto. Por ejemplo: hacer una lámpara utilizando como pie una botella.
-Reciclar: destruir un objeto para volverlo a crear.

Cuando las empresas de reciclado dicen que fabricar una botella cuesta 1.000 y reciclarla sólo 100 se está olvidando (un olvido totalmente voluntario) que reutilizarla cuesta sólo 1. Claro que no es de esperar que una empresa de reciclado tire piedras contra su propio tejado. Otra cosa son las administraciones que se ha subido al carro del reciclado porque es "políticamente correcto" olvidando lo realmente correcto.

Lo que viene al caso de un documental que he visto este fin de semana. Hablaba de África, de Costa de Marfil y del "mayor centro de reciclado del mundo". En ese sitio compraban coches y camiones usados (de más de diez años) y los hacían funcionar otros veinte más (REUTILIZACIÓN). Cuando ya no podía ser, lo convertían en cosas como carretillas (RECUPERACIÓN). En ningún momento se reciclaba nada, porque para eso se necesita una tecnología que no estaba a su alcance.
Recordemos: reciclar es volver a meter el material en el ciclo de producción. Destruir para volver a crear. En Costa de Marfil no lo hacen: con lo que tienen, mucho trabajo y más imaginación se dedican a recuperar, pero no a reciclar.

Mención aparte merece el cartón. El papel usado, su único destino posible es el reciclado. De acuerdo. Pero el cartón puede ser reutilizado y recuperado antes de pasar al reciclado. Y además tiene un buen precio, por lo que entre cartoneros (ilegales) y empresas de reciclado (que se supone pagan sus impuestos) viven gracias a convencer a la población de dos cosas: que hay que reciclar y que no tiene valor.
No tendrá valor, pero tiene un buen precio.
Muchas empresas recuperan el valor del cartonaje. Día, AhorraMás, todos los hipermercados. Pero a las pequeñas empresas y las personas de a pie se nos ha convencido que no puede venderse en un chamarilero (¿qué ha pasado con ellos?). Porque hay que colaborar con el medio ambiente.
¿Alguien nota la contradicción?

No hay comentarios: